SAN JUAN, Puerto Rico – Daddy Yankee y Nicky Jam cerraron el 2016 de forma impactante y excitante, con cuatro electrizantes conciertos Los Cangris que agotaron las localidades del famoso Coliseo de Puerto Rico, José Miguel Agrelot. Los dos iconos del Reggaeton tenían mucho que festejar después de haber conseguido en forma conjunta seis nominaciones para los próximos premios ‘Lo Nuestro’ de Univision.

Los conciertos Los Cangris también fueron una celebración enérgica de la música tribal, y del reencuentro de dos talentosos amigos que unieron fuerzas en los años 90, y luego pasaron más de una década separados antes de su reciente reconciliación. Para reflejar la fuerza de los artistas, fueron vitales los imponentes e innovadores diseños del espectáculo de iluminación, a cargo de dos LDs de fama internacional: David Ayala de Daddy Yankee, y Juan David Guerrero de Nicky Jam.

Basándose en las características y rendimiento de más de 120 equipos de CHAUVET Professional suministrados por Musique Xpress Lights, los dos diseñadores crearon una infinidad de escenas para los cuatro conciertos.

Esta versatilidad era necesaria para los conciertos Los Cangris, que fueron totalmente distintos en las dos noches. Comenzando con un video que anuncia la reconciliación de los cantantes, el espectáculo continuó llevando a la audiencia por un viaje musical con éxitos como «Shaky Shaky Remix» de Daddy Yankee y clásicos como «Guayando», «Seguroski» y «Muévete y perrea» que trajeron a la memoria los días underground de los inicios del Reggaeton. Las emociones también se desbordaron cuando las estrellas hicieron el primer dueto del concierto, «La combi complete». En medio de todo, la iluminación proyectó los vaivenes de la música con colores cambiantes, movimientos de pan y tilt, patrones de gobo y diversos ángulos de haz.

 La polifacética plataforma de iluminación incluyó 24 Rogue RH1 Hybrid dispuestos sobre el escenario y en varias estructuras que se colocaron en cuatro diferentes niveles de altura. Las potentes cabezas móviles con lámpara de 330 watts se utilizaron como efecto beam, así como para bañar el escenario y a la audiencia. Los amplios cambios del ángulo del haz de los equipos, facilitaron a los diseñadores ajustar el área de cobertura en diferentes momentos de los conciertos.

Otra pieza clave del sistema fue el COLORado Batten 72 Tour. Ayala y Guerrero emplearon 36 de estos efectos lineales RGBWA, coordinándolos con los enormes paneles de video del centro y los costados del escenario. Las filas del COLORado Batten 72 Tour se colocaron por encima y por debajo de los paneles de video, añadiendo dimensión e impacto a las imágenes proyectadas.

En la parte superior del sistema de luces se instalaron dos filas de cuatro paneles LED Nexus 4×4. Otros 21 paneles Nexus 4X4 se colocaron sobre una estructura arqueada en lo alto del centro del escenario. Además de definir las áreas superiores de la plataforma, los Nexus funcionaron como cegadores hacia el público, y para hacer baños de color.

También llenaron el escenario de color 20 COLORado 4 IP y 16 COLORado 1 IP ubicadas sobre cuatro estructuras situadas a ambos lados de la pared de video central. Los diseñadores usaron frecuentemente los COLORado para formar un profundo fondo de colores intensos detrás de los artistas. Así fue como crearon el ambiente perfecto para celebrar el triunfo del poder de la amistad y la magia de una música que nace del corazón.