Fue justo y apropiado que el renombrado diseñador Belga Koert Vermeulen haya sido elegido para iluminar el ‘Árbol de la Vida’ en la Expo Milán 2015. Elevándose a una altura de 37 metros en el cielo de Milán antes de extenderse con un patrón en espiral de curvas entrelazadas, capta la atención de todos los que pasan por el lugar. Sin embargo, hay algo más en esta magnífica obra que sólo su belleza. Erigido en un pasaje que separa dos relucientes cuerpos de agua, el árbol inspirado en Miguel Ángel transmite una inconfundible sensación de armonía y equilibrio, dos cualidades que no sólo han caracterizado las creaciones de Vermeulen, sino que también reflejan toda su obra.

El LD nacido en Amberes comenzó a trabajar con la luz a los 14 años. A los 20 años ya se había convertido en un diseñador de iluminación notable, y ha trabajado en algunos de los lugares más prestigiosos en el mundo como la Biblioteca Real de La Haya y los Campos Elíseos, donde su diseño de iluminación para los ‘Anillos del Árbol’ se ha convertido en una tradición navideña para los parisinos. Sin embargo, también confecciona la iluminación para los conciertos de EDM, clientes corporativos como Hermes y Microsoft, además de centros comerciales y bancos.

Conservar esta ecléctica cartera de clientes no sólo es un buen negocio para ACT Lighting Design, la empresa de Vermeulen con sede en Bruselas, sino que también le ayuda a mantener el equilibrio. El tener que atender las necesidades de una mezcla de clientes muy diversas, parece haberle dado una perspectiva general que abarca la iluminación en todas sus dimensiones. También ha agudizado su sentido de la visión, lo que acentúa las cualidades que hacen que el hombre y sus diseños sean únicos. Por nuestra parte, nos sentimos afortunados de haber tenido la oportunidad de hablar con él y escuchar sus ideas. Confiamos en que usted también lo disfrute.

Amberes, su ciudad natal, tiene una rica tradición como pionera en creatividad gracias a las genialidades de Van Dyck y otros artistas. ¿Sus raíces en esta ciudad han contribuido a su sentido del diseño?
«Honestamente no lo sé. La respuesta fácil sería ‘sí’, pero cuando creces en una ciudad es difícil darse cuenta como esto influye en tu manera de ver las cosas. En retrospectiva, sin embargo, creo que sí existió una influencia a un nivel subliminal, no era algo de lo que yo estuviera consciente. Muchos de mis compañeros de educación secundaria siguieron carreras relacionadas con las artes, así que quizás también fue parte de nuestro entorno».

Es impresionante la forma en que has destacado en una amplia gama de géneros de iluminación, desde la iglesia de Sante Marie, festivales de música, o el ‘Árbol de la Vida’ en Milán. ¿Por qué extiendes tus alas abarcando tanto en lugar de especializarte como muchos otros diseñadores lo hacen?
«Creo que me fastidiaría. Siembre estoy en busca de nuevos desafíos. Regresando a mis orígenes, Bruselas no está muy asociada con un tipo específico de iluminación como Nueva York con el teatro y la televisión. Si uno busca crear un diseño de iluminación exitoso, debe ser más diverso. Aquí no hay una forma dominante de iluminar, así que siempre hago un amplio rango de proyectos diferentes. Creo que tal vez esto lo explica más que el propio aburrimiento».

Por supuesto que has tenido logros sobresalientes en el arte de la iluminación, como tu reciente e impresionante trabajo del Árbol de la Vida en la Expo Milán en Italia. ¿Nos podrías hablar de ello?
«Si, muchas gracias. Estoy muy orgulloso de ese trabajo. Fue una sensación maravillosa crear ese diseño. El Árbol de la Vida está inspirado en un trabajo de Miguel Ángel y en realidad es una metáfora de nuestra vida. Crecemos y nos extendemos con el paso de los años. Logramos un equilibrio entre la belleza de la naturaleza y la caótica vida social que desarrollamos como personas. Debemos reconocer que el progreso tiene un costo, y la mejor manera de enfrentarlo es buscar el balance entre el bien y el mal de la naturaleza y el progreso, de la misma forma en que equilibramos la creatividad y las preocupaciones prácticas de nuestra vida como diseñadores de iluminación».

¿Cómo se logra ese equilibrio?
«Debes tener una buena perspectiva, y si deseas expresarte por completo y echar a volar tu instinto creativo, debes recurrir al arte de iluminar. Cuando creas una iluminación artística eres el único responsable. Tu creación refleja tu visión y esperas que la gente comprenda tu mensaje, pero lo importante es que eres libre de expresar ese mensaje. Esto es algo muy gratificante».

Tal parece que has logrado ese equilibrio en su carrera. Dinos ¿cómo has hecho para que llevar esto a la iluminación?
«Comencé a trabajar con la iluminación cuando tenía 14 años, alquilando los equipos de un amigo. Iluminé desfiles de modas, conciertos y otros eventos. Siempre estaba rodeado de luz. Me gustó el negocio y los aspectos creativos de lo que hacía. El concepto de diseñador de iluminación lo conocí hasta los 22 años, pero en realidad ya era lo que yo hacía en aquel entonces, al menos por mi propia cuenta».

Hace un momento mencionaste a Miguel Ángel; ¿Piensas que los pintores renacentistas como él habrían podido ser buenos diseñadores de iluminación, considerando la forma en que utilizaban colores y sombras?
“Es una pregunta interesante, pero no sabría la respuesta. Estos pintores sin duda se interesarían por lo que hacemos los diseñadores de iluminación. Ellos trataban de plasmar la naturaleza en sus lienzos de la forma más cercana que les era posible. Les apasionaba capturar la forma en que la iluminación interactuaba con la gente. Pero ¿eso los haría buenos diseñadores de iluminación? No lo sé. ¿Qué es en realidad un buen diseñador de iluminación?»

¡Muy buena pregunta! ¿Sabes la respuesta?
«¡Jajaja! ¡No estoy seguro como responder a eso! No creo haber hecho lo suficiente para dar una buena respuesta que aplique a todas las posibilidades. Hay muchos ingredientes que se combinan en el diseño de iluminación, y eso hace que sea imposible contestar esa pregunta».