Trabajando con un impresionante diseño de producción de Travis Shirley, el diseñador de iluminación Ignacio “Iggy” Rosenberg de Lightswitch, mapeó ingeniosamente cada píxel en más de 300 piezas de luces estroboscópicas/washes motorizadas Color STRIKE M en el enorme escenario para el espectáculo de Karol G en el Estadio Santiago Bernabéu para la parada de la superestrella en Madrid de su gira de 62 fechas Mañana Será Bonito.

35 de las Color STRIKE M delinearon el arco, mientras que las 275 unidades restantes se ubicaron a lo largo del escenario, enmarcando las dos pantallas grandes del escenario, así como alineando una pantalla pentagonal más pequeña y cuatro torres de delay FOH. Para los espectáculos de Madrid, se agregaron 68 luces Color STRIKE M más a la circunferencia del estadio. Esto no solo animó la atmósfera del lugar, sino que también agregó volumen y profundidad para la transmisión en vivo.

En el centro de la producción había un imponente arco que alcanzaba unos 21 metros de altura. Rosenberg animó este enorme elemento escénico delineándolo con 35 luminarias Color STRIKE M. “El arco del excelente diseño de Travis Shirley me brindó un excelente lugar para comenzar a iluminar el escenario”, dijo Rosenberg.

“We did a ton of pixel mapping,” said Rosenberg. “Every cell was really used individually to get as much flexibility throughout the show. Given the overall arc of the design, we constrained the palettes we used for the first two sections of the show, so we needed all the tools we could have to create different looks.”

Throughout the show, Rosenberg and his team (lighting director Danny Navarro, as well as programmers PJ Carruth, Rob Smith and Josh Lowenstein), supported Karol G’s performance with an endless stream of richly varied and engaging looks from the playful with a lot of primary and pastel colors, to celestial with twinkling displays of light, to the sultry and sophisticated. In short, they embraced every dimension of this powerful star in light.

Rosenberg ran the color cells in his Color STRIKE M fixtures at 60-percent, while the white cells were kept at 50-percent. “We limited the STRIKE M’s output for most of the show, to coordinate with the video walls,” he said. “Then, at the last song, we went with full output for maximum impact.”